Salmos y experiencia personal de Dios

Salmo 56. Después de un conflicto doloroso

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

Antífona. Me apoyo en ti, Señor, nada temo


Señor y Padre mío, ten piedad de mí.
Siempre tengo a alguien que me oprime y acosa;

Siento que se me vigila sin cesar.

Felizmente tus amigos están conmigo;
Y si el miedo me acecha, me apoyo en ti.

R/ Padre, releo tu Palabra con acción de gracias;
Me asegura que estás conmigo, nada temo.

¿Qué mal podrá hacerme el hombre?

Está para hacerme sufrir,
Para ingeniárselas en hacerme daño:

Me acechan y siguen mis pasos;
Creo que quieren acabar con mi vida.

No tiene el aspecto de creer que tú me miras;
Sé que tu amor no los abandona.

Tienes cuenta de mis luchas estériles;
Te acuerdas de mis humildes sacrificios
Como si lo anotases todo en tu libro.

Mis problemas por desaparecer,
El día en que me juzgues bien:
Lo sé, te preocupas siempre de mí.

R/ Padre, releo tus palabras con acción de gracias;
Me aseguran tu presencia: nada temo;
No espero nada de la gente.

Tengo compromisos contigo, Padre;
Te presento en ofrendas lo mejor que tengo,
Pues debo vivir aún hoy día;

Me has preservado de muchos pasos falsos
Permitiendo que marchara bajo tu mirada,
A la luz de la Vida que pones en mí.