Con el corazón ante los salmos
Salmo 77. “ A la vista de sus padres hizo portentos, en territorio egipcio, en la campiña de Soán. Hendió el mar para abrirles paso sujetando las aguas con un dique. Los guiaba de día con la nube, de noche con el resplandor del fuego...Sacó arroyos de la peña e hizo bajar el agua como ríos”.

Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

Sentimientos:

- Historia de salvación general y personal
- Providencia
- Fe
- Dudas
- Abrazos
- Riqueza

Reflexión:

• Me encuentro de lleno con tu historia de salvación en favor de los hombres, y también con mi historia personal. Una historia que va atravesando los obstáculos de este peregrinación hacia tu encuentro definitivo, tejida de altos y bajos pero iluminada siempre con la luz de tu presencia amada.
• Si echo mi vista atrás, sólo encuentro tu Providencia que ha cuidado mi vida en momentos difíciles, y tu bondad que has derramado con suavidad en aquellos otros en los que me rebelaba contra ti, absurdamente, Señor, pero soy humano, no ángel
• Puedo constatar que la fe que me has dado se ha arraigado en mí tan fuertemente que, ante todos los peligros y opciones por los que ha podido pasar mi vocación de llamado, tú siempre me has orientado por las sendas de la claridad de la fe.
• Me encuentro dichoso por la salvación que obras en la comunidad de tus creyentes y en la mía personal.
• Tan es así que, convencido de que es inútil luchar contra ti, he tomado la actitud de que todo mi ser descansa en ti. Las dudas desaparecen de mí como nubles que eclipsa el sol; las quejas contra ti se han vuelto abrazos de Padre a hijo en una unión tan perfecta que, desde ahora, sé que ante ti no cabe la duda o la queja, sino “mojarse” por tu Reino cada día más y más y más.
• Ante cristianos que van trancas y a barrancas por tu camino, siento pena. De verdad. Porque no tienen experiencia de la meditación de tus Salmos.
• Al contrario de los orgullosos que centran su fe en la riqueza, te confieso, Señor, que mi única riqueza eres tú.

Buenos días, Señor, y gracias.