Himno

Tu alabanza, tu gloria, tu encanto

Fuente: Liturgia de las horas

   

Tu alabanza, tu gloria, tu encanto,

Bernardino, en un nombre se cifra:

es el nombre total de tu amor,

nombre humano y Persona divina.

 

Lo paseas por calles y plazas,

y doquiera que vas lo predicas,

y lo grabas en los corazones,

y en radiantes banderas lo pintas.

 

invocarlo es asirse a la Fuerza,

pronunciarlo es suprema delicia,

y rumiarlo, saciar nuestras almas

de alimento, salud, medicina.

 

Santo hermano, que ahora en el cielo

contemplando a Jesús te extasías,

pídele que nosotros le amemos

como tú, con ardor y alegría.

 

¡Gloria al Padre en unión del Espíritu,

gloria a Dios que en Jesús se humaniza

y nos ama y nos salva y nos llama

a cantarle su gloria infinita!  

 

Amén.