Himno

Cuando el gallo, tres veces negaste a tu Maestro

Fuente: Liturgia de las horas

 

Cuando el gallo, tres veces

negaste a tu Maestro;

y él tres veces te dijo:

"¿Me amas más que éstos?"

 

Se te puso muy triste

tu llanto y tu silencio:

pero la Voz te habló

de apacentar corderos.

 

Tu pecado quemante

se convirtió en incendio,

y abriste tus dos brazos

al madero sangriento.

 

La cabeza hacia abajo

y el corazón al cielo:

porque, cuando aquel gallo,

negaste a tu Maestro.

 

Amén.