Himno meditado
El dolor extendido por tu cuerpo

Fuente: Liturgia de las horas

Reflexión: Padre Felipe Santos Campaña, SDB

 

 

El dolor extendido por tu cuerpo,
sometida tu alma como un lago,
vas a morir y mueres por nosotros
ante el Padre que acepta perdonándonos.

Cristo, gracias aún, gracias, que aún duele
tu agonía en el mundo, en tus hermanos.
Que hay hambre, ese resumen de injusticias;
que hay hombre en el que estás crucificado.

Gracias por tu palabra que está viva,
y aquí la van diciendo nuestros labios;
gracias porque eres Dios y hablas a Dios
de nuestras soledades, nuestros bandos.

Que no existan verdugos, que no insistan;
rezas hoy con nosotros que rezamos.
Porque existen las víctimas, el llanto. 

Amén


Reflexión:

.Dios se cansa de los reinos, pero no de las florecillas.

.Señor, ante el momento de tu muerte, siento que a ella te llevaron, además de nuestros pecados, la ira y la rabia de los reyezuelos que veían mal tu amor al pobre y la desaparición dela esclavitud, el trato por igual a la mujer...

. En ese momento en que tanto sufrías en lo físico, estabas haciendo la voluntad del Padre para buscar el perdón de nuestros pecados.

. Ahí, clavado en la cruz, te doy las gracias más sinceras por la vida nueva que nos has devuelto a raíz de tu muerte.

. Fuiste tan bueno e inteligente que, para no quedar todo en la cruz, nos has dejado los Evangelios, punto de referencia de todo lo que somos.

.Quisiera que, desde el valor que me da verte en la cruz, comenzara a hablar de ti con decisión a los demás, pero antes, viviendo todo el sentido que tiene tu muerte para la salvación radical del ser humano.