Himno meditado
Comienzan los relojes...

Fuente: Liturgia de las horas

Reflexión: Padre Felipe Santos Campaña, SDB

 

 

Comienzan los relojes
a maquinar sus prisas;
y miramos el mundo.
Comienza un nuevo día.

Comienzan las preguntas,
la intensidad, la vida;
se cruzan los horarios.
Qué red, qué algarabía.

Más tú, Señor, ahora
eres calma infinita.
Todo el tiempo está en ti
como una gavilla.

Rezamos, te alabamos,
porque existes, avisas;
porque anoche en el aire
tus astros se movían.

Y ahora toda la luz
se posó en nuestra orilla. 

Amén.


Reflexión:

. Señor, sumido en la realidad de esta sociedad, es difícil luchar para librarse de tanto ruido, de tanta algarabía, de tanto estrés, de tanta prisa.

. Por eso, Señor, antes de comenzar a meterme en esta corriente de la vida, me detengo un rato para estar contigo a solas o en comunidad para cargar las pilas de mi energía espiritual y no perderme por esta ruta de la prisa.
. Y lo hago porque contigo me viene la paz anhelada, la dicha. Miro tu universo. Sigue las reglas fijas de su salida del sol, de la blanca luna, de las estrellas brillantes y la nueva luz. Y alucinado ante esta maravilla, me uno a ti durante todo el día. Hay tiempo para todo. Y el mejor empleado es el que paso en tu presencia.