Himno meditado
Velaron las estrellas el sueño de su muerte

Fuente: Liturgia de las horas

Reflexión: Padre Felipe Santos Campaña, SDB

 

 

Velaron las estrellas el sueño de su muerte, 
sus luces de esperanzas las recogió ya el sol, 
en haces luminosos la aurora resplandece, 
es hoy el nuevo día en que el Señor actuó. 

Los pobres de sí mismos creyeron su palabra, 
la noche de los hombres fue grávida de Dios, 
él dijo volvería colmando su esperanza, 
más fuerte que la muerte fue su infinito amor. 

De angustia estremecida lloró y gimió la tierra, 
en lágrimas y sangre su humanidad vivió, 
pecado, mal y muerte perdieron ya su fuerza, 
el Cristo siempre vivo es hoy nuestro blasón. 

De gozo reverdecen los valles y praderas, 
los pájaros y flores, su canto y su color, 
celebran con los hombres la eterna primavera 
del día y la victoria en que el Señor actuó. 

Recibe, Padre santo, los cánticos y amores 
de cuantos en tu Hijo hallaron salvación, 
tu Espíritu divino nos llene de sus dones, 
los hombres y los pueblos se abran a tu Amor. 

Reflexión:


. Los hombres son crueles, pero el hombre es bueno.

.Señor, hoy me siento especialmente enternecido. Brillan en mis ojos las luces blancas con las que sueña mi esperanza.

. Sé que estás actuando continuamente en cada persona para realizar en ella lo mejor que lleva en sí misma.

.Has sido tan divino que has vencido el mal, el pecado y a la misma muerte con tu fuerza de resurrección.

. Por eso, al mismo tiempo que lloraba y gemía la tierra por tener en su seno a un inocente, así yo te doy las gracias por tu hazaña salvadora.

.Me visto hoy de nuevo, con vestidura blanca para acercarme a tu santo sacramento, la Eucaristía.