Himno meditado
Temblando estaba de frío

Fuente: Liturgia de las horas

Reflexión: Padre Felipe Santos Campaña, SDB

 

 

Temblando estaba de frío
el mayor fuego del cielo,
y el que hizo el tiempo mismo
sujeto al rigor del tiempo.

Su virgen Madre le mira,
ya llorando, ya riendo,
que como en su espejo en el Niño,
hace los mismos efectos.

No lejos el casto esposo
mirándole está encogido,
y de los ojos atentos
llueve al revés de las nubes,
porque llora sobre el cielo. 

Amén.

Reflexión:


. Mientras voy caminando, se me derrama el agua de mi cántaro. ¡Qué poca me queda para mi casa!

.Señor, quisiera acercarme a tu cuna para darte el calor que siente mi corazón. Te veo temblando de frío aunque eres fuego que nos da la vida diaria para estar contigo haciendo el bien.

.María, gracias por haberte prestado en tu seno virginal para que de ti naciera el Sol que nos calienta, nos da la luz de la belleza y el amor lindo que entregamos a todos, principalmente a quienes me corresponden con sus atenciones, y también- como creyente- a todos el mundo.

.José, gracias por ser esposo casto con la familia sagrada. Obediente, dócil a los mandatos divinos y trabajador como carpintero.

. Sois los tres, tres flores nunca marchitas.