Himno meditado
Siempre es hora de la gracia

Fuente: Liturgia de las horas

Reflexión: Padre Felipe Santos Campaña, SDB

 

 

Siempre es hora de la gracia,
¡despierte el alma dormida!

Los cangilones del sueño
van hurtando el agua viva
en la noria de las horas,
de las noches y los días.

Peldaños de eternidad
me ofrece el tiempo en su huída,
sí, ascendiendo paso a paso,
lleno mis manos vacías.

Sólo el tiempo se redime,
quitándole su malicia.

Como una sombra se esfuma
del hombre vano los días,
pero uno solo ante Dios
cuenta mil años de espigas.

"Tus años no morirán",
leo en la Sagrada Biblia:
lo bueno y noble perdura
eternizado en la dicha.

Sembraré, mientras es tiempo,
aunque me cueste fatigas.

Al Padre, al Hijo, al Espíritu
alabe toda mi vida:
El rosario de las horas,
de las noches y los días. 

Amén.



Reflexión:

.No temo al fuego vivo, que me avisa con su llama; ¡pero líbrame tú de la brasa moribunda que esconde la ceniza!

.Alma mía, despierta que el día ha amanecido. El tiempo, como una noria que saca agua del pozo, así mi vida humana y con un alma hecha a tu imagen y semejanza, saca de la fuente de tu vida, el agua que le dan espíritu nuevo.

.Cada hora que paso mientras el cangilón sube lleno de agua, quiero que mi existencia poco a poco se dirija a la eternidad.

. Haz que llene mis manos de obras buenas. Que no sólo me contente con tenerlas limpias, sino pletórica de caricias con gente que de mi han recibido el consuelo que necesitan.

.Sé que nada morirá, me dices en tu Escritura. Haz que las lea y medite todos los días.